dimanche 13 octobre 2013

Repsol abandona sus planes en Cuba y facilita sus compras en EEUU

Repsol ha decidido salir de Cuba. La petrolera ha abandonado definitivamente el país tras el fallo registrado en las perforaciones realizadas a lo largo de 2012 y después de que el Gobierno de Raúl Castro aplaudiera la decisión de la argentina Cristina Fernández de Kirchner de expropiar YPF.
Con esta decisión, que se culminó en diciembre del año pasado, la petrolera que preside Antonio Brufau se libra de las reticencias mostradas con anterioridad por el Gobierno estadounidense sobre sus proyectos de exploración y logra una mejor relación de cara a futuras operaciones de compra en el país, que la empresa no descarta llevar a cabo a medio plazo.
Repsol está buscando operaciones de compra tanto en Estados Unidos como en Canadá para poder invertir hasta 15.000 millones -si se cierra la venta de su participación en Gas Natural- y de hecho ya mantiene una opcion de compra sobre um nuevo dominio minero de Sand Ridge y suena como candidato a la compra de una compañía en Ohio.

Cierre progresivo

La petrolera realizó a principios de 2012 su primer intento de perforación en Cuba, pero en mayo se informó de que la zona explorada no tenía petróleo. La compañía indicó que sus operarios iban a proceder a cerrar el pozo, pero se mantuvo la duda de si se seguiría explorando en el resto del dominio minero que poseía.
El equipo de geólogos de la empresa española tenía previsto analizar los pasos siguientes en otras perforaciones, tal y como se indicó en aquel momento, y de hecho perforó un segundo pozo, que tampoco resultó exitoso para su comercialización.
Tras los resultados negativos del sondeo Jagüey, Repsol decidió finalmente cancelar el contrato de exploración en el área -de ese modo evitó realizar la tercera perforación- y una vez cumplidos los requisitos establecidos por las autoridades del país, cerró definitivamente cualquier presencia en el Cuba el 31 de diciembre de 2012, principalmente, la oficina que tenía en La Habana.
Repsol era la operadora de un consorcio del que formaban parte, además de la petrolera con un 40 por ciento, la noruega Statoil y la india OVL, ambas con un 30 por ciento. La compañía, según las cifras que manejó El Nuevo Herald, podría haber destinado a este proyecto cerca de 150 millones.
Con este paso, Repsol se acerca una vez más a las directrices llegadas desde Estados Unidos, que suele presionar a las empresas españolas con presencia en dicho país por la Ley Helms-Burton. De hecho, la compañía tuvo que construir una plataforma ad hoc -la Scarabeo 9- con menos del 10 por ciento de productos estadounidenses- para poder operar en la zona.
La petrolera también salió de un gran proyecto de gas en Irán por las presiones ejercidas por la Casa Blanca, así como de senadores y congresistas estadounidenses.
La Administración Obama, tal y como indicó en su momento este diario, expresó sus reticencias por los proyectos de exploración en Cuba, una zona próxima a la costa del estado de Florida, tras el vertido de BP en 2010 en el Golfo de México que causó graves daños medioambientales.
El propio secretario de Estado de Interior, Ken Salazar, llegó a desplazarse a Madrid para mantener una reunión con el por entonces responsable de exploración y producción, Nemesio Fernández Cuesta, que le dio todas las garantías de que el procedimiento se realizaría cumpliendo con los mayores estándares de seguridad del sector.

Inversión de 1.200 millones

La petrolera espera cerrar este año con 29 pozos perforados frente a los 17 pozos del año anterior, según los datos que la compañía facilitó esta pasada semana en una conferencia con analistas organizada por Bernstein.
Este fuerte incremento supone un crecimiento de la inversión hasta los 1.200 millones, frente a los 900 millones del ejercicio anterior.
Repsol ha realizado en el primer semestre un total de 12 perforaciones de las que nueve han resultado exitosas en Estados Unidos, Brasil, Colombia, Argelia y Rusia.
En 2014, la compañía espera seguir creciendo y desarrollar alrededor de 35 nuevos pozos en el oeste de África, concretamente en Namibia, Angola, Liberia y Mauritania, así como desarrollar la zona de Campos Basin 33 (Brasil), Libia, Argelia, Rusia, Alaska (Estados Unidos), Kurdistán, Canadá, Rumanía, Noruega y el lecho marino de Colombia. El objetivo es pasar de los actuales 320.000 barriles diarios de petróleo a los 500.000 barriles en el año 2016, tal y como fijó en su plan estratégico.
Repsol sigue al mismo tiem po entrando en nuevos países, como Nicaragua, para seguir diversificando sus zonas de exploración.

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